Reflexionemos sobre cómo
erradicar la
Mutilación
Genital Femenina.
Un asunto que también compete a la
geografía.
©
La mutilación
genital femenina consiste en realizar una clitoridectomia (por lo que se
extirpa total o parcialmente el clítoris), la escisión (extirpación de la
totalidad o de parte de los labios menores) y la ablación de los labios mayores
para crear superficies en carne viva que después se cosen o se mantienen unidas
con el fin de que, al cicatrizar, tapen la vagina. Se deja una pequeña abertura
para permitir el paso de la orina y del flujo menstrual.
©
El primer acto
sexual solo puede realizarse después de la dilatación gradual y dolorosa de la
abertura que ha quedado tras la mutilación. Muchas mujeres tienen que ser
sometidas nuevamente a practicarles incisiones para hacer posible la
penetración. Algunas recién casadas sufren graves heridas a causa de incisiones
mal realizadas por sus esposos; para estos poder penetrarlas.
©
Puede provocar
la muerte, presentarse dolores, conmoción, hemorragias y danos en los órganos
que rodean el clítoris y los labios. Puede producirse retención de orina y
desarrollarse infecciones graves. La utilización del mismo instrumental en
varias muchachas sin esterilizarlo puede provocar la propagación del VIH.
Infecciones crónicas del tracto urinario, piedras en la vejiga y la uretra,
trastornos renales, infecciones del tracto genital a consecuencia de la
obstrucción del flujo menstrual, infecciones en la pelvis e infertilidad,
tejido cicatrizal excesivo, queloides y quistes dermoides son parte de las
implicaciones de esta práctica; sin mencionar los problemas psicológicos.
©
Algunas
entidades (Unicef), países (Ghana, Eritrea, Gran Bretaña, Suecia, Suiza, entre
otros) han unido sus esfuerzos para tratar de erradicar lo que en mi opinión
constituye uno de los mayores atropellos y maltrato al género femenino; no
obstante y a pesar de los escasos logros obtenidos por estos, dicha práctica
continua y peor aún cuenta con el aval de las mujeres adulta de los países que
la fomentan los cuales se estiman en más de veintiocho.
©
Me parece
aberrante que existan personas que abogan a favor de esta práctica tomando en
cuenta lo antes expuesto. Las razones que expresan para defender esta medida
están amañadas de ideas machistas que dejan a un lado la salud física y
emocional de la mujer. Si las naciones fueran más enérgicas e inclusivas , pienso que los cambios serian significantes. Las Naciones
Unidas se han entrometido en conflictos que no les atañen, han impuesto su
voluntad con el pretexto de que es “Justicia” entonces porque el protocolo ante
esta situación. Por qué no apoyar a los esfuerzos para la erradicación de esta
práctica que se alimenta de la ignorancia, desconocimiento e ideas arcaicas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario