MI SONRISA
Si me preguntas por una
cualidad física que me distingue, te diría: ¡MI SONRISA! No es que sea
arrogante ni pretenciosa, pero si a alguien conozco bien en esta vida es a mí.
Pienso que todos deberíamos pasar diez minutitos diarios en la intimidad, de
cara al espejo, no para ver el largo de nuestro cabello, las espinillas que
surgieron o la silueta de nuestro cuerpo. A fin de cuenta, esas son cosas
vanas, no les voy a negar que nos proveen una falsa seguridad y sentido de felicidad y digo falsa; porque
mi gente, si fuera por belleza exterior ningún artista de Hollywood o
escultural figura del ámbito artístico lloraría en la vida real por una
desilusión o engaño.
El punto sobre el espejo es: el
detenernos frente a él, para reconocernos espiritualmente. Provocar ese
encuentro con nuestra persona y si no nos conocemos presentarnos. Y de ahí en
adelante comenzar una estrecha relación de amistad. La razón sobre la enemistad
del individuo consigo mismo es por no conocerse, se rechaza. Y se rechaza porque entra en conflicto con
las cualidades y características de su propio ser; ese que aún no conoce pero
24/7, anda con él. Pasa, que estamos tan acostumbrados a mostrarnos como la
norma social espera, a sentir como la norma social impone que acabamos por
creérnoslo. En el fondo, muy adentro de nuestro interior, algo nos dice: está
muy bien lo que haces o sientes; pero, ¿sabes
qué? no me da felicidad.
Quien no se conoce así mismo, no se
acepta y le disgusta o siente cierto grado de incomodidad al describirse. Como somos muchos con la misma discapacidad,
acordamos como sociedad que todo individuo que habla sobre sus cualidades,
características y se reconoce con orgullo, debe ser catalogado como
pretensioso, arrogante y hasta narcisista. Es por ello que hay que ser celoso
con el contexto en que se emplea toda cuestión del Yo y velar por los
comparativos.
Mi sonrisa es especial, no por ser
mágica, no porque sea más linda que la de los demás, ni porque posea dientes
mega blancos! Cosa que no tengo. ¡Jajajajaja! Mi sonrisa es especial, porque
siempre esta dibujada en mi rostro. Ella no se ilumina con la luz de mis ojos;
para mí… ella ilumina ¡mi contorno! ¿Que cómo lo sé? ¿Cómo me di cuenta? A través de mis fotos.
Hoy olvidé sonreír… Lo cotidiano del
diario vivir y sus exigencias, lograron absorberme. No me pasa normalmente,
pero hoy me sumí en mis pensamientos inadvertidamente y al pasar frente a un
acostumbrado público en un acostumbrado escenario, donde todos estaban
acostumbrados a ver el destello de mi sonrisa; al mirarme jamás imaginaron que
no tenía ganas de reír.
No se trata de fingir una sonrisa, pues
no se hacerlo. Cuando sonrió me sale espontaneo, porque es reflejo de la
personalidad de mi alma.
Me
gusta reír y decir buenos días…
Me
gusta reír y decir Holaaaa….
Me
gusta reír y preguntar: ¿Cómo estás?
¡Suelo
tener mi sonrisa siempre lista y ser la primera que la brinda!
Pero hoy, olvide sonreír, iba caminando
cabizbaja intentando ocultar mi rostro del candente sol que me daba. Cuando
presentí la mirada de aquellas personas que ya tenía acostumbradas a mirarles y
saludarlas con mi sonrisa y unos ¡buenos días!
Hoy ellos fueron los que me dijeron
¿Cómo estás? Y hoy fueron ellos los que me alegraron el día al sonreírme. Al
detenerme a observar quien me saludaba, mis ojos se enfocaron en la silueta de
sus labios y la alegría que sentían, la intuición me dijo que estaban contentos
de verme, de saludarme y que reían esperando de vuelta la mía.
Experimenté la magia de cómo tanta
energía positiva se puede transmitir al sonreír y olvidé tan de prisa en que
pensaba al recordar mi propio gesto, que me sorprendí. Cuando llegué a donde me
dirigía, no pude dejar de pensar en todo lo que sentí… “qué curioso” me dije,
sonreí y al hacerlo me di cuenta que desde que salí de mi casa hasta ese
encuentro con mi gente cotidiana había olvidado… ¡Mi Sonrisa!
Levy/
HOY
EXPERIMENTO PAZ
Mientras
cumplo mis expectativas, voy recogiendo experiencias unas gratas otras no, hilvanando
ilusiones y superando decepciones. Cosecho amistad e intercambio sonrisas.
Mientras voy rumbo a mis expectativas. Descubro ideologías y perspectivas
distintas, abono mi jardín espiritual. Me permito pausas para estar con mis amigos de infancia y
adultez temprana. Siempre habrá tiempo
para aquellos que constituyen la historia de mi vida. Esos que siempre han
estado conmigo a pesar de la distancia, sin preguntas, sin dudas. ¡Los Verdaderos! Los que crecieron a
mi lado… desde kindergarten hasta el presente… desde la Escuela Superior hasta
el presente. Bendita tecnología que nos hace más fácil la tarea de alimentar
nuestra amistad. En mi ESCALADA, recuerdo
a muchos de mi primera profesión con cariño. A otros con dolor, Gracias por sus
palabras de ánimo, por simplemente comentar. Los llevo en mi corazón.
En el umbral
de mis 40, me disfruto ver a mis hijos entrar y salir de su adolescencia,
aprendiendo a lidiar con sus cambios. Es un crecimiento reciproco y
gratificador. Hoy compartí la mañana con mi hijo mayor, pronto cumplirá su mayoría
de edad. Verlo convertido en todo un hombre de bien a la sociedad es mi
recompensa. Todas las decisiones que tomé en su momento, hoy han dado su fruto.
Veo a un ser fuerte, decidido, capaz de afrontar sus errores y estoico al
enmendarlos. ¡Eso
me llena de orgullo! Le doy Gracias al Creador. Hoy mi hijo y yo conversamos sobre asuntos de la vida en medio
de un almuerzo, reímos y cuando me dejó
en mi casa, le dije ¡Gracias!
¡El
me respondió Gracias a ti!
Levy/
AZUL
22/nonoviembre/ 2013.
Si me preguntas por una
cualidad física que me distingue, te diría: ¡MI SONRISA! No es que sea
arrogante ni pretenciosa, pero si a alguien conozco bien en esta vida es a mí.
Pienso que todos deberíamos pasar diez minutitos diarios en la intimidad, de
cara al espejo, no para ver el largo de nuestro cabello, las espinillas que
surgieron o la silueta de nuestro cuerpo. A fin de cuenta, esas son cosas
vanas, no les voy a negar que nos proveen una falsa seguridad y sentido de felicidad y digo falsa; porque
mi gente, si fuera por belleza exterior ningún artista de Hollywood o
escultural figura del ámbito artístico lloraría en la vida real por una
desilusión o engaño.
El punto sobre el espejo es: el
detenernos frente a él, para reconocernos espiritualmente. Provocar ese
encuentro con nuestra persona y si no nos conocemos presentarnos. Y de ahí en
adelante comenzar una estrecha relación de amistad. La razón sobre la enemistad
del individuo consigo mismo es por no conocerse, se rechaza. Y se rechaza porque entra en conflicto con
las cualidades y características de su propio ser; ese que aún no conoce pero
24/7, anda con él. Pasa, que estamos tan acostumbrados a mostrarnos como la
norma social espera, a sentir como la norma social impone que acabamos por
creérnoslo. En el fondo, muy adentro de nuestro interior, algo nos dice: está
muy bien lo que haces o sientes; pero, ¿sabes
qué? no me da felicidad.
Quien no se conoce así mismo, no se
acepta y le disgusta o siente cierto grado de incomodidad al describirse. Como somos muchos con la misma discapacidad,
acordamos como sociedad que todo individuo que habla sobre sus cualidades,
características y se reconoce con orgullo, debe ser catalogado como
pretensioso, arrogante y hasta narcisista. Es por ello que hay que ser celoso
con el contexto en que se emplea toda cuestión del Yo y velar por los
comparativos.
Mi sonrisa es especial, no por ser
mágica, no porque sea más linda que la de los demás, ni porque posea dientes
mega blancos! Cosa que no tengo. ¡Jajajajaja! Mi sonrisa es especial, porque
siempre esta dibujada en mi rostro. Ella no se ilumina con la luz de mis ojos;
para mí… ella ilumina ¡mi contorno! ¿Que cómo lo sé? ¿Cómo me di cuenta? A través de mis fotos.
Hoy olvidé sonreír… Lo cotidiano del
diario vivir y sus exigencias, lograron absorberme. No me pasa normalmente,
pero hoy me sumí en mis pensamientos inadvertidamente y al pasar frente a un
acostumbrado público en un acostumbrado escenario, donde todos estaban
acostumbrados a ver el destello de mi sonrisa; al mirarme jamás imaginaron que
no tenía ganas de reír.
No se trata de fingir una sonrisa, pues
no se hacerlo. Cuando sonrió me sale espontaneo, porque es reflejo de la
personalidad de mi alma.
Me
gusta reír y decir buenos días…
Me
gusta reír y decir Holaaaa….
Me
gusta reír y preguntar: ¿Cómo estás?
¡Suelo
tener mi sonrisa siempre lista y ser la primera que la brinda!
Pero hoy, olvide sonreír, iba caminando
cabizbaja intentando ocultar mi rostro del candente sol que me daba. Cuando
presentí la mirada de aquellas personas que ya tenía acostumbradas a mirarles y
saludarlas con mi sonrisa y unos ¡buenos días!
Hoy ellos fueron los que me dijeron
¿Cómo estás? Y hoy fueron ellos los que me alegraron el día al sonreírme. Al
detenerme a observar quien me saludaba, mis ojos se enfocaron en la silueta de
sus labios y la alegría que sentían, la intuición me dijo que estaban contentos
de verme, de saludarme y que reían esperando de vuelta la mía.
Experimenté la magia de cómo tanta
energía positiva se puede transmitir al sonreír y olvidé tan de prisa en que
pensaba al recordar mi propio gesto, que me sorprendí. Cuando llegué a donde me
dirigía, no pude dejar de pensar en todo lo que sentí… “qué curioso” me dije,
sonreí y al hacerlo me di cuenta que desde que salí de mi casa hasta ese
encuentro con mi gente cotidiana había olvidado… ¡Mi Sonrisa!
Levy/
Mientras cumplo mis expectativas, voy recogiendo experiencias unas gratas otras no, hilvanando ilusiones y superando decepciones. Cosecho amistad e intercambio sonrisas. Mientras voy rumbo a mis expectativas. Descubro ideologías y perspectivas distintas, abono mi jardín espiritual. Me permito pausas para estar con mis amigos de infancia y adultez temprana. Siempre habrá tiempo para aquellos que constituyen la historia de mi vida. Esos que siempre han estado conmigo a pesar de la distancia, sin preguntas, sin dudas. ¡Los Verdaderos! Los que crecieron a mi lado… desde kindergarten hasta el presente… desde la Escuela Superior hasta el presente. Bendita tecnología que nos hace más fácil la tarea de alimentar nuestra amistad. En mi ESCALADA, recuerdo a muchos de mi primera profesión con cariño. A otros con dolor, Gracias por sus palabras de ánimo, por simplemente comentar. Los llevo en mi corazón.
En el umbral
de mis 40, me disfruto ver a mis hijos entrar y salir de su adolescencia,
aprendiendo a lidiar con sus cambios. Es un crecimiento reciproco y
gratificador. Hoy compartí la mañana con mi hijo mayor, pronto cumplirá su mayoría
de edad. Verlo convertido en todo un hombre de bien a la sociedad es mi
recompensa. Todas las decisiones que tomé en su momento, hoy han dado su fruto.
Veo a un ser fuerte, decidido, capaz de afrontar sus errores y estoico al
enmendarlos. ¡Eso
me llena de orgullo! Le doy Gracias al Creador. Hoy mi hijo y yo conversamos sobre asuntos de la vida en medio
de un almuerzo, reímos y cuando me dejó
en mi casa, le dije ¡Gracias!
¡El
me respondió Gracias a ti!
Levy/
AZUL
22/nonoviembre/ 2013.
22/nonoviembre/ 2013.
Anoche queria acostarme bonita, seducirme y exhibir mis mejores galas. Anoche me seduje de azul.
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