Llegó el pasado de visita...
Trajo consigo, recuerdos sin emociones agresivas. La armonía, sabiduría y ecuanimidad con la cual lo observo, es lo que tengo en mí ser para ofrecer en esta etapa de mi vida.
Llegaste a visitar de manera impertinente. Ya sabias que no serías bienvenido. Aún así, te aventuraste.
Sabes, me aturdiste con tu llegada y te invité a pasar. Nos sentamos a conversar. Nos despedimos con un nos volveremos a ver y yo asentí... Te retiraste.
A tu partida me senté a analizar, mis emociones y tus palabras... y sabes qué más, tu no me perteneces, no eres mi pasado. Sí tuvimos algo que ver, en un entonces. Pero mi proceso terminó en aquel entonces... quienes me dañaron no lo hicieron por maldad, sino por ambición y en su ambición desmedida, no tomaron conciencia de los daños colaterales.
Con el pasar de tu tiempo lo entendí y ascendí...
Querido Pasado:
Eres ajeno a mi ser, no te reconozco y no te haré espacio en mi presente. No tenemos ningún pendiente. Sé objetivo, analiza el tablero, observa y anticipa las jugadas. TODOS buscan ganar y para lograrlo TODOS, me colocan en el juego.
No eres mi Karma y mucho menos mi batalla. Así que buenas noches Pasado de otros.
Mañana me despediré formalmente de tí. No me perteneces y sinceramente...
no te quiero.
Levy/
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